Adiós a la impotencia con la llegada del verano

Durante el verano todo es diferente, el estrés se alivia, tenemos más tiempo libre para descansar, realizar actividades sociales y estar con nuestra pareja, todas estas actividades estimulan nuestras relaciones sexuales. Pero el cambio del clima durante esta estación trae consigo cambios físicos en nuestro cuerpo.

Se ha visto que los varones que acuden a consulta durante el invierno con trastornos de disfunción eréctil, a medida que se aproxima el periodo de verano, presentan una mejoría; incluso pueden empezar a dejar el medicamento y logran recuperar su vida sexual.

Esto se debe a que el incremento de la luz y el calor en el ambiente durante esta época, repercuten en los neurotransmisores cerebrales que actúan a nivel sexual, estimulando glándulas como el hipotálamo y la hipófisis, que a su vez liberan otras hormonas andrógenas como la testosterona, que es la hormona masculina por excelencia. Las altas concentraciones hormonales en el cuerpo producen un incremento en el deseo y actividad sexual.

Existen otras hormonas cuya producción también se ve afectada con la llegada del verano y que influyen en nuestra vida sexual; tal es el caso de la serotonina, endorfinas y las feromonas, la sensación de placer y la atracción que surge con el sexo opuesto se incrementan. Así que aquellos hombres que padecen de disfunción eréctil por causas hormonales, deben alegrarse: ¡llegó el verano!