5 tips para que la pasión no muera

Las buenas relaciones sexuales te enriquecen emocional y espiritualmente, relajan tus  músculos,  hacen que te olvides de las preocupaciones y te ayudan a conseguir un sueño reparador; pero, ¿qué  se puede hacer para qué el deseo y la pasión  no se acaben? 

En primer lugar, la pasión dura lo que tiene que durar ya que es la combinación no sólo de la atracción que se genera en la pareja, sino también de sus circunstancias de vida.

Para  evitar que el deseo se desvanezca, Salud180.com y  Lía Soriano, sexóloga y terapeuta del Centro de Educación e Información  y sexo: El Armario Abierto, te presenta cinco innovadoras formas para incrementar el deseo: 

1. Sé quien eres. En un mundo plagado de modelos, el tratar de parecernos a alguien, ya sea en lo físico o en estilo siempre será una tentación; sin embargo no hay nada que nos haga más atractivos ante los ojos ajenos que el ser nosotros mismos, esa combinación única a la que a veces no le sacamos ningún provecho, por la sencillísima razón de que creemos que somos “tan comunes y corrientes”. Qué tal si antes de intentar erotizar a otros nos dedicamos a autoerotizarnos descubriendo nuestros mejores puntos en todos los sentidos.

2. Cuida tu cuerpo. Éste es un instrumento maravilloso que utilizamos al hacer el amor, por tanto conocerlo y cuidarlo es el siguiente paso. Un cuerpo querido y acostumbrado a expresarse siempre será erotizante. No olvidemos que el órgano sexual más extenso que tenemos es la piel  y el más importante el cerebro ya que es él quien nos dice qué deseamos sexualmente, cómo es que lo deseamos y con quién decidimos compartirlo.

3. Confía. Todos  nacemos con impulsos eróticos, no obstante la confianza sexual se aprende. Hablar de nuestros miedos, prejuicios y cosas que nos avergüencen es importante. Déjate ser, confía en tus sensaciones. Piensa menos y actúa más.

4. Prepárate para hacer el amor. Dedica algo de tiempo a averiguar qué complace a tu pareja y sobre todo regálate el tiempo que te sea necesario para conocerte, descubrir tus necesidades e intereses y apapacharte.

5. No evadas los problemas. Antes de hacer el amor procura resolver los conflictos que existan en ese momento, no importa lo sencillos que parezcan. Para negociar tienes que hablar desde tu realidad, olvídate de interpretar a tu pareja y plantéale claramente qué es lo que necesitas y pídele que  haga lo mismo.

No tengas miedo de proponer, de investigar, sé curiosa, juguetona, ríe mucho y no temas sentir. El único pecado real es censurar y castigar  nuestros cuerpos y nuestros sueños porque alguien hace mucho tiempo tuvo miedo de sí mismo.

No temas decirle a tu pareja lo que sientes y esperas, recuerda que por algo le has elegido. ¡Amate y respétate!

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