Límites y razón contra el enojo infantil

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Ayuda a cambiar el estado de ánimo de tu hijo
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Pilar Maguey

POR: Pilar Maguey

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12-11-2010

Los especialistas de la organización estadounidense Adults and Children Together against Violence (ACT, por sus siglas en inglés), dependiente de la Asociación Norteamericana de Psicología, llevan años estudiando los efectos de la violencia dentro de las familias y desde la sociedad, el control del enojo y la resolución pacífica de los conflictos.

 

Nadie como ellos para ofrecer recomendaciones a madres y padres que no saben cómo ayudar a una niña o niño enojado.

 

Ayúdele a calmarse. Con voz firme y normal, dígale “basta o cálmate”. Sugiérale alguna manera de tranquilizarse, desde pedirle que se siente en una silla y respire profundamente, hacerle contar hasta 25 en voz baja, o incluso recomendarle que se retire a su cuarto y se eche agua fría en la cara. Ayude a la criatura a darse cuenta que ha logrado apaciguar su enojo.

 

Cuando la o el menor se ha calmado, pídale que piense las razones de su enfado. Escuche con calma y respeto, sin interrumpirlo, para realmente conocer lo que está diciendo. Recuerde que la gente se enoja cuando piensa que está pasando algo injusto o incorrecto. Ayúdela a describir lo que causó su enojo.


Ayúdele a empatizar con los sentimientos de otras personas, ya sean los suyos o los de otra gente. Esto significa auxiliar al infante a entender los puntos de vista, las emociones y acciones de las y los demás.

 

Con calma y cariño, explíquele sus sentimientos respecto a la situación.

 

Ayúdele a escoger la mejor solución para resolver el conflicto. Esto puede incluir: pedir disculpas; solicitar ayuda a una persona adulta; alejarse de la situación; declarar firmemente la razón de su enojo y después alejarse de la situación; llegar a un acuerdo con la o el otro niño sobre las reglas de juego o el uso de un juguete; irse a un lugar especial para tranquilizarse, o hacer algo distinto que le entretenga.

 

Restablezca su relación con la niña o el niño. Dígale que todavía le quiere y le aprecia, pero que su mal comportamiento debe cambiar. Puede alabarle o recompensarle por sus esfuerzos o por cualquier cambio positivo cuando se enoja o cuando trata de calmarse y escoge mejores soluciones para resolver el conflicto.
 

Aclaracion:

El contenido mostrado es responsabilidad del autor y refleja su punto de vista, más no la ideología de Salud180.com

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